jueves, 14 de abril de 2011

“BARRIOS SOSTENIBLES:ORDEN, DESÓRDENES, CONTRAORDEN” de Lucien Kroll, Arquitecto-urbanista

(...) El urbanismo y la arquitectura modernas, artificializadas, se han hecho adversarios del humanismo y de la hospitalidad y han conseguido incluso, desde hace años, ser indiferentes a los desastres anunciados por la contaminación y el despilfarro. Tras el periodo creativo de antes de la última guerra, han generado una forma criminógena de urbanismo/arquitectura. (...) Pues hay desórdenes violentos, destructivos pero siempre significativos y otros constructivos, vivos, creativos e indispensables. Y en otros lugares, casi en paralelo pero de forma pacífica, hay comités de barrio que combaten proyectos inconvenientes. Sin embargo, no he visto casi ninguno obtener una cooperación sincera y sostenible con un proyecto común, apacible. Su única victoria es triste: matar el proyecto: siempre la guerra y la duplicidad...
Remedios: ecología, cooperación, decrecimiento sostenible, la arquitectura orgánica muestra las relaciones más responsables y directas con el hombre/naturaleza, nueva densidad, conurbación (unión de varias áreas metropolitanas por su crecimiento -N. del T.-) por componentes (gestos de habitantes: peatón calle plaza), multiculturas, transformabilidad, complejidades (barrios diversos y mezclados), etc. (…) Todas las mercancías se artificializan y masacran a los campesinos y los artesanos, también la alimentación mata el sabor (fast food versus slow food).
Urgente, por tanto: contraorden, un gran giro, primero en el afecto y la razón, luego en el cuadro político (permitir) y en la experimentación y la acción. En la práctica es urgente dar a conocer (ignorancia y mutismo: prensa, escuelas, etc.) una verdadera participación (no la demagogia de consultas a posteriori o la geopolítica brutal y muda) y experimentar prototipos que aprendan unos de otros, como por ejemplo la “manera” de Ita Gassel y la “programación generativa”. (USA y Michel Conan).
Y por fin, poner los relojes en hora.
¿Cuándo veremos nacer un barrio sostenible valerosamente  “al día”, abierto a su entorno, relacional, diverso en todos sus componentes, transformable frente a la evolución de las costumbres, ligado al trabajo, al comercio, a la cultura, “tal y como venga”? Y de un talla suficiente para evitar el ghetto, y abierto al futuro: nunca acabado.
Su organización se apoya en la participación de sus futuros habitantes (o presuntos) para formar un núcleo (incluso hipotético) y trabajar con ellos para desembocar  en un “proyecto social” y en un “proyecto técnico” diseñado por los arquitectos como un “modelo para romper”, pedagógico (…) que pueda ser modificado en un calendario de decisiones, a medida que el proyecto social se desarrolla. Esta organización crea relaciones activas entre vecinos: es lo contrario de una comunidad cerrada o de un anonimato urbano. Su forma es la imagen compleja de las relaciones de vecindad y nunca la del párking o el almacén.
Se enriquece la complejidad invitando a representantes de la educación, la filosofía, el comercio, mezclándolos con el grupo inicial: se convierte en una micro-sociedad. La “programación generativa” nos ayuda a ello.
El tema principal de esta vida en común es evidentemente la sostenibilidad: la forma que adquiere el esquema de barrio se convierte rápidamente en algo “ecológico-activo”, su composición se transforma en una “eco-diversidad viva”. Los temas generales son discutidos y adoptados en la libertad y la diversidad de los indivíduos. La Alta Calidad Ambiental (premio concedido a barrios sostenibles -N. del T.-) es una obligación natural: debemos ambicionar, al menos la “vivienda pasiva autónoma”, independiente de los suministros (agua, gas, electricidad, calefacción, etc.), residuos domésticos (compost, biodigestores), utilización de materiales renovables. Se habla de alimentación ecológica, slow food, car-sharing y car-pooling (un coche para varias personas), etc. Y las discusiones de los grupos eligen automáticamente algunos lugares públicos, más densos en encuentros espontáneos (…).
La urgencia climática impone prototipos más fundamentales que las experiencias especializadas en técnicas económicas: se trata aquí en primer lugar de un modelo natural contemporáneo de hábitat en común, de sensibilidad ante la vecindad. No se puede hacer menos...

Traducción: Federico

2 comentarios:

  1. Lucien Kroll conoce nuestro barrio, ha desayunado en la antigua churrería que había junto al local de la Asociación y paseado por las calles de Vistabella y La Paz.

    Aquella mañana del domingo 11 de mayo de 2008 amaneció lluviosa, pero no faltó a su cita con nosotros, un grupo de vecinos que queríamos mostrarle la cruda realidad de nuestros barrios, las heridas y despropósitos que los especuladores proyectaban sobre ellos.

    Nacho Tornel, presidente de la A.VV. de La Paz ,hacía de intérprete en un fluido francés, le hacía llegar nuestras inquietudes y nos traducía sus palabras, sus consejos, sus propuestas,y su ánimo: "Estos barrios serán lo que vosotr@s queráis que sean".

    Caminaba lentamente, miraba, nos escuchaba, preguntaba y hacia fotos sobre el paisaje urbano.

    Fue una mañana inolvidable en compañía de este caballero belga de 84 años, auténtico "quijote" de la arquitectura y el urbanismo en Europa.

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  2. Fue una suerte estar en ese reducido grupo que acompañó y escucho las sensaciones de este señor elegante, restaurador de espacios urbanos degradados y de mentes cretinas, que con todos sus años nos demostró que nunca es tarde cuando se actúa con voluntad participativa. La realidad de sus palabras parecen un triste epitafio, ya que el barrio está siendo lo que quieren los vecinos.

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